¿Es bueno tomar agua con limón en ayunas para adelgazar?

• El agua con limón ayuda a perder peso, es antiinflamatoria y mejora la memoria
• Más allá de adelgazar: los beneficios para la salud de beber agua de limón

Está comprobado que tomar agua con limón en ayunas presenta una serie de beneficios. Y, aunque ninguna solución es milagrosa y debe ir acompañada por una dieta equilibrada y ejercicio físico, lo cierto es que esta bebida tan sencilla de preparar y tan barata nos ayuda en muchas cosas: es un antiséptico natural que contribuye a desinfectar heridas en la piel y a aliviar dolores de garganta; reduce las inflamaciones y la acidez en nuestro cuerpo, especialmente en las articulaciones; nos permite digerir mejor los alimentos que comemos, sobre todo los grasos; y los flavonoides que posee son antioxidantes e incluso pueden ayudar a prevenir ciertas enfermedades.

Por supuesto, su alto contenido en vitamina C también es muy importante, ya que resulta muy beneficiosa para mejorar el rendimiento tanto de nuestro sistema inmunitario como del nervioso, así como hacer que nuestra sangre circule mejor, y hasta puede reducir el cansancio que sentimos al permitir la generación que elementos necesarios para nuestro organismo, entre otras ventajas.

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Por si fuera poco, los expertos también señalan que tomar agua con limón en ayunas puede potenciar aún más algunos de sus beneficios: por ejemplo, sus efectos diuréticos se vuelven así especialmente eficaces, las toxinas se depuran mejor y nuestros órganos se mantienen saludables. Pero ¿hasta qué punto puede servirnos el agua con limón en ayunas si nuestro objetivo es adelgazar y perder peso?

Agua con limón en ayunas para adelgazar

Ciertamente, beber agua con limón en ayunas es una práctica que puede ayudarnos a perder peso. Lo primero que hay que tener en cuenta es que hablamos de una bebida con un efecto saciante muy interesante pese a su bajo contenido en calorías: un vaso de agua al que le hayamos echado medio limón apenas aporta 2 kilocalorías, pero los polifenoles de su ácido cítrico y la pectina consiguen matar hasta cierto punto el hambre, por lo que no sentiremos el deseo de atiborrarnos con un desayuno copioso. Esto también resulta útil en las horas entre comidas, para no dejarnos llevar por el antojo de picar alimentos innecesarios y menos sanos.

Por lo tanto, algo tan sencillo como beber agua con limón puede ser la clave para muchas personas que buscan reducir su apetito y así llevar a cabo con menos complicaciones su dieta, por estricta que sea. Esta práctica alimentaria tiene la gran ventaja de reducir considerablemente las calorías que ingerimos, y no por ello deja de aportarnos elementos tan beneficiosos para nuestro organismo como el potasio, la vitamina C, los flavonoides o la fibra.

El agua con limón es sano e ideal para reducir el apetito a cambio de muy pocas calorías

Dicho eso, también conviene decir que los expertos recomiendan consumirlo con moderación, porque si nos pasamos con tanta vitamina C y ácido cítrico podríamos llegar a generar problemas y dolores en la piel y en el cuerpo: en este sentido, es importante que el líquido de limón puro que usemos no sobrepase los 120 ml en cada vaso (antes de mezclarlo con el agua). Además, hay que tener en cuenta que su consumo diario y excesivo puede erosionar levemente el esmalte dental, por lo que hay que tener cuidado y acudir al dentista si notamos este tipo de efecto.

En cualquier caso, lo apropiado es que preparéis el vaso con agua mineral tibia, y que le añadáis el jugo de medio limón recién exprimido. No agreguéis azúcar ni ninguna otra cosa, porque entonces el truco podría volverse en vuestra contra; como mucho una hoja de menta fresca, aunque no es necesario. Y, como decíamos, mejor si es por la mañana, justo cuando os despertéis.