La dieta que alivia los síntomas de la cistitis (y los alimentos que no debes tomar)
El consumo de ciertos productos, junto con el tratamiento médico adecuado, puede reducir las molestias. Ahora bien, también hay otros que pueden perjudicarte
Dolor o escozor al orinar, aumento de la frecuencia de las micciones, que además son más escasas, deseo permanente de ir al baño y, en ocasiones, orina teñida de sangre. Este es el cuadro clínico de la cistitis, una retahíla de síntomas que describe la doctora Ángeles Sanchís, uróloga del equipo de Ramírez Urología del Hospital Ruber Internacional, quien también recalca que la cistitis nunca produce fiebre.
La cistitis se define por un cuadro de dolor y escozor al orinar, pero nunca produce fiebre
Un dato que particulariza esta infección es que su prevalencia es muy elevada, especialmente en verano y entre las mujeres. De hecho, según cifras proporcionadas por la Asociación Española de Urología (AEU), alrededor del 50% de las mujeres pasa por un episodio de cistitis a lo largo de su vida, y dentro de este grupo, alrededor de un 30% tendrá varias infecciones urinarias.
Tener una uretra más corta lo explica en parte
En principio, la inflamación de la vejiga afecta tanto a hombres como mujeres. Ahora bien, tal y como demuestran los números, la realidad es que el porcentaje de afectadas es mucho más elevado en la población femenina. ¿A qué se debe esto? ¿Cómo lo explica la ciencia? Según la uróloga, hay varios factores que lo aclaran. Algunos de ellos afectan a todas, independientemente de la edad o la condición de cada una, y otros vienen determinados por las circunstancias. Así, "la longitud de la uretra en las mujeres, que es más corta, favorece que las bacterias lleguen desde la uretra a la vejiga con más facilidad", señala la experta. Pero también hay otros factores como "las relaciones sexuales, el estreñimiento, llevar la ropa interior más ajustada, el embarazo y la menopausia que posibilitan la aparición con mayor frecuencia y de forma recurrente en mujeres".
En cuanto al repunte estival de la cistitis, se debe a la falta de hidratación que suele darse en esta época del año. Y es que cuando esto ocurre, "la orina es más concentrada, y esto hace que se convierta en un caldo de cultivo ideal para que las bacterias se multipliquen con más facilidad".
Para empezar, beber mucha agua
Una de las principales medidas para evitar la cistitis por medio de la alimentación es "incrementar la ingesta de líquidos, principalmente de agua y sobre todo si son de mineralización débil, ya que contienen menos sodio, lo cual aumenta el volumen de orina", señala la experta.
Además de los líquidos, conviene priorizar alimentos que tengan un alto contenido en agua, ya que son diuréticos y, por tanto, muy útiles para las infecciones urinarias. "Entre ellos, podemos destacar los espárragos, el pepino, el tomate, la sandía o la piña. Lo ideal es consumir al menos cinco piezas de fruta o verdura al día", sintetiza Sanchís.
Los arándanos son los más eficaces, pero hay más
Uno de los mejores alimentos para prevenir las cistitis son los arándanos, "ya que contienen en su composición un flavonoide denominado proantocianina. Este alimento, en forma de zumo, inhibe la adhesión de las bacterias a las paredes de la vejiga. Para que sea eficaz contra las infecciones urinarias, se recomienda tomar un vaso de 250-300 ml de zumo de arándanos frescos al día", aconseja.
El consumo de espárragos, pepino, tomate, sandía o piña alivia los síntomas de la cistitis
Por otro lado, el consumo de infusiones, como las de abedul, también ayuda a aliviar los síntomas de la cistitis, gracias a que posee componentes antiinflamatorios. Una recomendación que la experta completa con la de tomar infusiones de cola de caballo, "ya que su poder diurético aumenta el volumen de orina y diluye el contenido bacteriano. También las infusiones de perejil son una buena opción por su aporte en apigenina, un potente antioxidante y antiinflamatorio que favorece la eliminación de las bacterias a través de la orina".
Una microbiota equilibrada también ayuda
De forma indirecta, una manera de hacer frente a las infecciones de orina es cuidando la microbiota intestinal. Esto es así porque "un organismo cuyos intestinos están poblados de fermentos beneficiosos está protegido de la colonización por otros agentes patógenos como las bacterias", aclara la experta.
En este sentido, no sería mala idea plantear una dieta que incluyera alimentos probióticos, como el yogur, con la intención de mantener un intestino con una microbiota variada y equilibrada. "En el caso de que el yogur no siente del todo bien, hay otras opciones saludables como el kéfir", sugiere la doctora.
Alimentos que empeoran los síntomas
Teniendo en cuenta que la deshidratación es uno de los factores que favorecen la cistitis, es fundamental evitar el consumo de aquellos alimentos que la propician. La experta señala cuatro grupos de alimentos como los principales que se deberían evitar: el alcohol, los embutidos, las bebidas azucaradas y los picantes.
"El alcohol contribuye a la deshidratación, por lo que favorece el crecimiento de las bacterias, el embutido tiene un alto contenido en sal y produce una orina más concentrada, las bebidas azucaradas favorecen el sobrecrecimiento bacteriano y, por último, los picantes contienen sustancias irritantes para la mucosa vesical", resume la uróloga.
Dolor o escozor al orinar, aumento de la frecuencia de las micciones, que además son más escasas, deseo permanente de ir al baño y, en ocasiones, orina teñida de sangre. Este es el cuadro clínico de la cistitis, una retahíla de síntomas que describe la doctora Ángeles Sanchís, uróloga del equipo de Ramírez Urología del Hospital Ruber Internacional, quien también recalca que la cistitis nunca produce fiebre.