Nutrición fértil para hombres: qué comer si quieres tener hijos

La tasa de fertilidad en España hace tiempo que deja mucho que desear. Según los últimos datos de la oficina europea de estadística Eurostat, en 2021, nuestro país fue el segundo con la tasa de fertilidad más baja de Europa, registrando 1,19 nacimientos por mujer. Una cifra, cuanto menos, preocupante. Sin embargo, el deseo de tener descendencia sigue ahí, adherido a esas mismas cifras que nos hablan de aumento de la infertilidad.

La infertilidad de las parejas se reparte al 50% entre los hombres y las mujeres

La búsqueda de una vía para tener hijos lleva a las parejas españolas al médico cada vez más. Se estima que entre un 15% y un 20% de ellas presentan infertilidad, siendo el hombre el causante en la mitad de los casos.

La mala alimentación, primera causa de la infertilidad

Sin entrar en la multiplicidad y grado de incidencia de las causas que nos han traído hasta donde estamos, Virginia Ruipérez, miembro de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF) y de la Sociedad Europea de Medicina Naturista Clásica, considera que la mala alimentación puede identificarse como el principal motivo que explica el deterioro de la calidad del esperma y, en última instancia, de la fertilidad masculina.

Ahora bien, ¿a qué se refiere la experta con "mala" alimentación? ¿Qué hábitos nutricionales están abocando a las parejas españolas a tener dificultades a la hora de tener hijos? La experta pone el foco en el consumo excesivo de alimentos procesados. "Este tipo de productos, debido a la manipulación a la que han sido sometidos, han perdido muchos de los nutrientes que activan la fisiología de la fertilidad", aclara.

A grandes rasgos, así explica el proceso la experta: "Cuando, por ejemplo, tuestas una almendra, su estructura química se rompe. Como consecuencia, la vitamina E que contiene, la cual es fundamental para la fertilidad, tanto masculina como femenina, pierde su capacidad de activar la hipófisis para que sintetice testosterona. En conclusión, los hombres que consumen frutos secos procesados, bien sea tostados o fritos, están más expuestos a un posible deterioro de la calidad su esperma".

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Además de evitar los procesados, la experta concreta los alimentos a evitar fundamentalmente en tres: el café, el alcohol, y muy especialmente, la soja.

Por otro lado, el incremento del consumo de aditivos químicos que acompañan al procesado es, según Ruipérez, otro de los factores que inciden en la degradación de la calidad del esperma.

¿Qué alimentos activan la fertilidad?

Una dieta que favorezca la producción y calidad de esperma mira con detalle el grado de procesamiento al que ha estado sometido. Cuanto mayor sea este, más esporádico debería ser su consumo.

La vitamina E se encuentra en los frutos secos, como las nueces, las almendras y los piñones

Por otro lado, desde el punto de vista de la composición nutricional, Ruipérez remarca la importancia de la vitamina E o tocoferol. Este micronutriente, también conocido como "la vitamina de la fecundidad", se encuentra en los frutos secos, como las nueces, las almendras y los piñones. También en las aceitunas, los aceites vegetales, el maíz o el germen de trigo. La mantequilla, el huevo, los espárragos, o las hortalizas de hoja verde como las espinacas o las acelgas, también son fuente de vitamina E.

Otros nutrientes que contribuyen especialmente en este asunto son la vitamina C, vitamina B6, vitamina B12, vitamina B9 o ácido fólico y el betacaroteno, precursor de la vitamina A.

En cuanto a los minerales, la experta señala el selenio, el manganeso y el zinc, 'sustancia seminal' por excelencia, como los nutrientes a tener en cuenta para recuperar un estado óptimo del esperma. En general, "las fuentes más ricas de vitaminas y minerales son los alimentos del reino vegetal, frutas (si son de temporada, mejor), verduras, hortalizas, cereales integrales, legumbres, frutos oleaginosos y algas", resume la experta quien destaca la importancia de las pipas de girasol, de calabaza y el aguacate. Especialmente, las pipas de calabaza, "ya que aportan vitamina E y zinc, oligoelemento que es precursor de la testosterona".

Llevar una dieta rica en vitamina E y zinc, "ayudará a mejorar el seminograma (análisis del semen) en unos tres meses", asegura la experta. "Incluso -añade- en ocho meses se ha comprobado que mejora la fragmentación del ADN del esperma".

Reducir el estrés para aumentar la fertilidad

Ruipérez considera la alimentación como el factor determinante en lo que a fertilidad se refiere. Sin embargo, no es el único. Otro de los elementos capaces de alterar la calidad del esperma es el estrés. Es por ello, que una dieta que ayude a controlar sus efectos, redundará en una mejora del semen. Partiendo de esta idea, la experta aconseja el consumo de vitamina B, ya que es precursora de la serotonina, hormona muy eficaz para el control del estrés.

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Por tanto, reducir el estrés es clave para alcanzar la fecundación. Para ello, actividades como el yoga, la meditación o el mindfulnes pueden ser un buen aliado, pero también la alimentación. "En este sentido, es fundamental consumir alimentos que contengan un buen aporte de vitamina B, como por ejemplo, el arroz integral. Es importante que sea integral, ya que el arroz blanco pierde las vitaminas cuando es refinado", recomienda la experta.