Menú
Una dieta rica en carotenos reduce el riesgo de aterosclerosis
  1. Nutrición
SEGÚN UN ESTUDIO

Una dieta rica en carotenos reduce el riesgo de aterosclerosis

Comer frutas y verduras de color amarillo, naranja y verde, es decir, con un alto aporte de carotenos, podría ayudar a frenar las enfermedades cardiovasculares

Foto:  Las zanahorias son ricas en carotenoides, en especial β-caroteno, fuente de provitamina A. (iStock)
Las zanahorias son ricas en carotenoides, en especial β-caroteno, fuente de provitamina A. (iStock)

No es el primer estudio que nos anima a enriquecer nuestra dieta con alimentos de origen vegetal con el objetivo de mejorar la salud, y en concreto, el estado de las venas, las arterias, el corazón y la circulación de la sangre. Sin embargo, en este caso, las conclusiones del trabajo dirigido por Gemma Chiva Blanch, del grupo del IDIBAPS Investigación traslacional en diabetes, lípidos y obesidad, que encabeza Josep Vidal, el interés se ha puesto en conocer cómo los carotenos participan en la formación de la placas de ateroma en la arteria carótida.

Un nivel elevado de carotenos en sangre se relaciona con una menor aterosclerosis

La investigación, llevada a cabo por la profesora agregada e investigadora de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) y miembro del CIBEROBN, ha sido publicada recientemente en la revista Clinical Nutrition. El equipo de científicos concluyó que un nivel elevado de carotenos en sangre se relaciona con una menor presencia de aterosclerosis en las arterias y, por lo tanto, con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares.

La valiosa aportación de 200 adultos

Para llegar a la conclusión que apunta Chiva, se convocaron y estudiaron a 200 personas con edades comprendidas entre cincuenta y setenta años, todas ellas formaban parte de la cohorte DIABIMCAP, reclutada por el grupo de Investigación transversal en atención primaria del IDIBAPS, que dirige Antoni Sisó Almirall. A los voluntarios que participaron en el estudio se les analizaron dos parámetros: la concentración de carotenos en sangre y, mediante una ecografía, la presencia de placas de ateroma en la arteria carótida.

¿Qué son los carotenos?

Sabemos que la alimentación y los hábitos de vida son determinantes en la aparición y desarrollo de las enfermedades cardiovasculares, como la aterosclerosis. Ambos aspectos pesan prácticamente lo mismo, e inciden claramente, junto con la carga genética, en el avance de estas patologías. Tanto es así, que los expertos siempre hablan de su origen multifactorial, ya que, se puede llevar una dieta perfecta en términos cardiosaludables, y sin embargo, padecer aterosclerosis si no va acompañada de la práctica de ejercicio físico regular. De modo que, alimentación y deporte van de la mano en la prevención de las enfermedades relacionadas con el sistema circulatorio. Y, por supuesto, no se puede ignorar la predisposición genética, frente a la que poco o nada podemos hacer.

placeholder Una dieta rica en frutas y verduras de color naranja garantiza un buen aporte de carotenos. (iStock)
Una dieta rica en frutas y verduras de color naranja garantiza un buen aporte de carotenos. (iStock)

En cualquier caso, el estudio liderado por Chiva, nos habla de la capacidad de los carotenos de frenar la aterosclerosis. Estos compuestos bioactivos están presentes en las frutas y verduras de color amarillo, naranja y verde (zanahorias, espinacas, lechugas, tomates, boniatos, brócoli, el melón naranja o cantalupo, pimiento, mango, papaya, albaricoques, nísperos, calabaza, etc.).

Foto: Zanahorias frescas. (iStock)

Hasta ahora, según Chiva, "los estudios no han sido concluyentes e incluso parece que, administrados como suplemento, tienen un efecto perjudicial". Sin embargo, tras la investigación, la docente y su equipo han podido demostrar que una mayor concentración de carotenos en sangre se traduce en una menor carga aterosclerótica, especialmente en mujeres.

Los carotenos están presentes en las frutas y verduras de color amarillo, naranja y verde

De hecho, a la luz de los datos procedentes de los participantes, la profesora confirma que "una dieta rica en frutas y verduras y, por lo tanto, en carotenos disminuye el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares".

De la aterosclerosis al infarto de miocardio y el ictus isquémico

Tal y como explica la Clínica Mayo, la ateroesclerosis es la acumulación de grasas, colesterol y otras sustancias dentro de las arterias y en sus paredes. Esta acumulación se llama placa y puede provocar el estrechamiento de las arterias y el bloqueo del flujo sanguíneo.

Además, estas placas de ateroma también pueden romperse y formar trombos que impiden la circulación de la sangre, de modo que produzcan infartos de miocardio, cuando la sangre no llega al corazón, o ictus isquémicos, cuando no llega al cerebro.

placeholder La aterosclerosis puede propiciar accidentes cardíacos como un infarto de miocardio. (iStock)
La aterosclerosis puede propiciar accidentes cardíacos como un infarto de miocardio. (iStock)

Ahora bien, esta afección se puede tratar, y los hábitos de un estilo de vida saludable pueden ayudar a prevenirla.

Sin embargo, cuando ya ha comenzado a desarrollarse la enfermedad es fundamental incorporar hábitos de vida saludables y nuevos protocolos alimentarios para tratar la enfermedad, y en la medida de lo posible ralentizar su progreso. Para ello, desde la Fundación Española del Corazón sugieren las siguientes recomendaciones para manejar la aterosclerosis:

  • Limitar el consumo de alimentos altos en colesterol.
  • Hacer ejercicio moderado y de forma regular. Mejor si está pautado por el cardiólogo.
  • Es fundamental tratar la obesidad y el sobrepeso.
  • Llevar un seguimiento de la hipertensión.
  • Controlar la diabetes.
Foto: La dieta para bajar el colesterol según la Fundación Española del Corazón. (Pexels/ Valeria Boltneva)

Si es necesario, el cardiólogo prescribirá medicamentos para corregir la hipertensión y los niveles altos de colesterol y azúcar. Ahora bien, si la aterosclerosis ya ha desembocado en un infarto, un ictus o en enfermedad renal, el tratamiento pasa por llevar a cabo técnicas terapéuticas como un cateterismo o la implantación de un stent (pequeño tubo de malla de metal que se expande dentro de una arteria del corazón). La cuestión es que si la persona que se somete a este tipo de técnicas no modifica sus malos hábitos de vida, el problema sigue ahí, avanzando de nuevo y con muchas probabilidades de que antes o después se produzca otro accidente cardiovascular.

No es el primer estudio que nos anima a enriquecer nuestra dieta con alimentos de origen vegetal con el objetivo de mejorar la salud, y en concreto, el estado de las venas, las arterias, el corazón y la circulación de la sangre. Sin embargo, en este caso, las conclusiones del trabajo dirigido por Gemma Chiva Blanch, del grupo del IDIBAPS Investigación traslacional en diabetes, lípidos y obesidad, que encabeza Josep Vidal, el interés se ha puesto en conocer cómo los carotenos participan en la formación de la placas de ateroma en la arteria carótida.

Salud
El redactor recomienda