¿Qué es la dieta FAFO y por qué todo el mundo quiere hacerla?

Cuando se trata de acabar con la obesidad y sus graves efectos sobre la salud, todas las propuestas son bienvenidas. En este sentido, una de las últimas dietas pensadas para atajar este preocupante problema de salud pública es la dieta FAFO, acrónimo de Flexible and Friendly for the Overweight.

La dieta FAFO es una dieta flexible y amigable, donde fácilmente se pueden hacer cambios en la alimentación

Aunque esta estrategia nutricional no es nueva, durante el último Congreso Nacional de Obesidad, celebrado en Sevilla el pasado mes de noviembre, se trataron en profundidad muchos de los aspectos que conlleva, como por ejemplo, sus numerosas posibilidades para combatir la obesidad. Además, se hizo especial hincapié a su utilidad en los entornos sociales con pocos recursos y en los países en vías de desarrollo.

Así es tu vida, así es tu dieta

Sin poner en duda la eficacia de otras dietas como la mediterránea, para hacer frente a la obesidad y el sobrepeso, la dieta FAFO, se revela como una vía que va un poco más allá. Es decir, que no solo nos dice qué alimentos nos convienen y cuáles es mejor evitar, sino que además, lo hace de la forma más personalizada posible, logrando con ello, la adherencia que muchas veces falta en los planes de adelgazamiento. "La dieta FAFO es una dieta flexible y amigable, donde fácilmente se pueden realizar cambios en la nutrición, en el ejercicio físico y en la capacidad psicológica, para facilitar al máximo su cumplimiento", define doctor Rafael Gómez y Blasco, miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO), experto en Endocrinología, Metabolismo y Nutrición, y director académico de la Federación Centroamericana y del Caribe de Obesidad y Metabolismo (FECCOM).

En consecuencia, la singularidad de esta opción dietética reside más en su aplicación y mantenimiento, que en la lista de alimentos que incluye. De hecho, según el doctor, "su aspecto más innovador es que tiene muy en cuenta la situación familiar, ancestral, social y económica del individuo". De esta manera, es posible personalizar al máximo las modificaciones en el estilo de vida de la persona. "Se trata de que el paciente pueda acoplar estos cambios de una manera muy fácil, y sin tener que olvidarse de sus costumbres familiares", señala el experto. Además, tiene la ventaja añadida de que se trata de una estrategia "muy cómoda y barata", añade.

Las mismas ventajas que la dieta mediterránea

Más allá de que el punto fuerte de esta dieta sea su poder para crear adherencia, algo fundamental en el marco de cualquier plan de adelgazamiento, la dieta FAFO también presenta numerosos e importantes beneficios para la salud. "Al tener como base la dieta mediterránea y algunas amerindias, proporciona valiosas ventajas sobre el riesgo cardiovascular, las complicaciones propias de la resistencia a la insulina, incluida la diabetes, y por supuesto, la prevención de gran parte de los procesos malignos del aparato digestivo", resume el doctor.

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Por tanto, sus efectos positivos para la salud, hacen de esta dieta una opción apta para todo el mundo. Si bien, según el doctor, "está pensada para personas que tengan problemas de peso, aquellas que quieran mejorar su musculación, individuos mayores, mujeres embarazadas, y niños en crecimiento". Y añade: "Por esta razón, la sociedades científicas nacionales e internacionales la apoyan. Además, se ha creado un curso a través de la fundación Social Health para instruir a los profesionales en la implementación de la dieta FAFO".

Quizá lo más novedoso de esta dieta sea la gran variedad de alimentos que se pueden consumir

Por otro lado, también existen excepciones para su idoneidad, ya que "hay muchas circunstancias en medicina -apunta el experto- que impiden la realización de las dietas flexibles, como es el caso de los enfermos diabéticos de tipo 1 al principio de su debut durante el embarazo, en las personas diabéticas, o en pacientes con insuficiencia renal o hepática grave, entre otras patologías".

Comidas "normales" con ajustes

Otro de los puntos fuertes de la dieta FAFO, y muy ligado también a su capacidad de adherencia, es que permite disfrutar de los platos que ya forman parte de nuestros hábitos diarios. De hecho, para el doctor, "tal vez lo más novedoso de esta dieta, sea la gran cantidad de alimentos que se pueden consumir. Eso sí, es preciso ajustar las cantidades y mantener unas pautas muy sencillas y abiertas para la preparación y cocción de los mismos.

Además, se ha de intentar "evitar los alimentos ultraprocesados, los que tienen muchos azúcares añadidos y las grandes frituras" advierte el doctor. "Algo que se enseña, tanto a los profesionales sanitarios, como a los pacientes, en los cursos de formación", apostilla.

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Siguiendo estas pautas, "al tratarse de un cambio real del estilo de vida, se producen pérdidas deseables de entre medio kilo y un kilo a la semana", señala el experto. Y añade: "Este avance no pretende, en modo alguno, convertirse en una dieta de moda para una pérdida rápida y milagrosa de peso".