La cantidad máxima de latas de atún que puedes comer a la semana, según la ciencia

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El atún en lata es uno de los productos que no pueden faltar en la cocina. España es un país con un alto consumo de este pescado, siendo la versión en conserva la más elegida, por detrás de la merluza fresca, según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan). Se come con gran frecuencia en los hogares y es un ingrediente que conforma infinidad de recetas.

La Guía de Alimentación de Sanidad recomienda ingerir entre 3 y 4 raciones de pescados porque conlleva efectos beneficiosos para la salud, ya que aporta energía, es una fuente de proteínas de alto valor biológico y contribuye a la ingesta de nutrientes esenciales como el yodo, el selenio, el calcio y las vitaminas A y D.

El contaminante que obliga a reducir el consumo de atún

Sin embargo, el atún es una de las especies con alto contenido en mercurio, junto al pez espada, el emperador, el tiburón y el lucio. En los pescados se presenta como metilmercurio, la forma química más tóxica de este metal pesado. Es un contaminante que puede afectar al sistema nervioso central en el desarrollo, de ahí que las embarazadas y los niños constituyan la población más vulnerable a su ingesta.

La Aesan explica que el mercurio supone un riesgo para la seguridad alimentaria. Pero esto no quiere decir que no se pueda consumir. Hasta ahora se había establecido que el límite se encontraba en dos latas de atún a la semana para evitar una exposición elevada al contaminante. Pero Europa Press informa que para fijar las raciones recomendadas debe tenerse en cuenta el perfil de la persona y el tamaño de los envases.

Cuántas latas se pueden comer a la semana

Es cierto que se debe controlar su consumo, pero la ciencia no ha podido establecer el número de latas exactas. Esto se debe a que el peso cambia dependiendo de la marca, por lo que cantidad de metilmercurio también varía.

“Dos latas de las mayores disponibles en el mercado español (112 gramos) contienen aproximadamente 0,06 mg de metilmercurio (es decir, 60 microgramos), una cantidad inferior a la que las autoridades sanitarias consideran peligrosa para un adulto medio (alrededor de 90 microgramos para una persona de unos 70 kilogramos)”, explica EP.

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En el estudio de la Aesan se analizaron 21 latas de atún y hallaron que el nivel medio de mercurio (0,26 mg/kg) se situó muy por debajo del límite máximo establecido en la UE para mercurio en atún (1,00 mg/kg). Así, indican que el margen existente hasta alcanzar la ingesta semanal tolerable es amplio.

Pero advierten que un porcentaje relativamente alto de niños y mujeres embarazadas superan el valor de ingesta semanal tolerable establecido por la EFSA. Los expertos explican que el metilmercurio afecta a los riñones y al Sistema Nervioso Central, en especial durante el desarrollo, al atravesar tanto la barrera hematoencefálica como la placenta. Puede provocar alteraciones en el desarrollo normal del cerebro de los lactantes y a dosis mayores inducir cambios neurológicos en los adultos.