Los 10 alimentos antiinflamatorios especialmente recomendados a partir de los 50
Una dieta rica en frutas y hortalizas se asocia con un menor riesgo de estados inflamatorios, que en muchos casos son la causa de las enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2
Una alimentación saludable consiste en ingerir una variedad de alimentos que te aporten los nutrientes necesarios para mantenerte sano, sentirte bien y tener energía. Estos nutrientes incluyen proteínas, carbohidratos, grasas, agua, vitaminas y minerales.
Una dieta rica en frutas y hortalizas se asocia con un menor riesgo de estados inflamatorios, que en muchos casos son la causa de las enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2 o las enfermedades cardiovasculares.
Por ese motivo, puede resultar muy beneficioso asegurarnos de incluir en nuestra dieta los alimentos que están considerados más positivos y adecuados para personas, especialmente de más de 40 años. Según la revista especializada en nutrición Eat This, Not That, existen superalimentos que puedes comer con regularidad para ayudar a ralentizar el proceso de envejecimiento.
- Arándanos: además de sus beneficios para la memoria, los arándanos también juegan un papel importante en la prevención del envejecimiento. Sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias son clave para mantener la salud y vitalidad de la piel, así como para proteger el cuerpo de enfermedades crónicas
- Fresas: si le preguntas a tu frutero qué vitaminas tiene la fresa, seguro que te responde que está llena de vitamina C. Y no te engaña, porque otro de sus grandes valores de la fresa es su gran aporte de vitamina C, muy similar al de la naranja.
- Aguacate: contiene alrededor de 15 nutrientes que van desde calorías, carbohidratos, proteínas, fibra alimenticia, Vitaminas A, C y E, Folatos, Potasio, Magnesio, Hierro, Calcio y Sodio, así como grasa monoinsaturada. Entre sus beneficios encuentras: Reduce los niveles de colesterol malo en sangre y aumenta el colesterol bueno.
- Almendras: contienen minerales como calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio, zinc, cobre, manganeso y selenio. También es fuente importante de vitaminas E, A, B1, B2, B3, B5, B6, B9. Su consumo combate la diabetes al ayudar a controlar el azúcar en la sangre.
- Granada: se trata de una fruta que tiene forma acampanada y que puede alcanzar un tamaño de entre cinco y doce centímetros. Posee propiedades antioxidantes debido a los polifenoles que la conforman, que se potencian en forma de zumo. Además, la gran cantidad de vitamina C que una granada aporta hace de esta fruta una excelente aliada para combatir los resfriados.
- Cúrcuma: dado que es un potente antiinflamatorio, es útil para tratar el dolor y las enfermedades inflamatorias: artritis, artrosis, enfermedad periodontal, etc. Previene el párkinson y el alzhéimer. Es útil para tratar las enfermedades gastrointestinales, como la fibrosis hepática y la enfermedad inflamatoria intestinal.
- Pistacho: uno de los principales beneficios que se atribuyen a este alimento es la capacidad reguladora de la glucemia postpandrial, esto es, el nivel de glucosa, o azúcar, en sangre después de las comidas.
- Salmón: es una fuente de proteínas y minerales excelente. Contiene yodo, magnesio, fósforo, selenio, hierro y calcio. El aporte de vitaminas ayuda al buen funcionamiento de la tiroides y el intestino. Contiene una alta cantidad de vitamina D, ayuda a la formación de la estructura ósea y, por tanto, fortalece los huesos.
- Tomate: El tomate es muy rico en hierro -un mineral imprescindible para la sangre- y en vitamina K, que regula la coagulación, además de en vitaminas C y E, por ese motivo, mejora la circulación sanguínea.
- Verdura de hoja verde: son antioxidantes, con alto contenido en fibra, potasio, hierro, calcio y magnesio. Sus minerales protegen nuestras células. También son una fuente de ácido fólico (vitamina B9). Se trata de una sustancia que nos protege de enfermedades cerebrales o cardiovasculares.
Una alimentación saludable consiste en ingerir una variedad de alimentos que te aporten los nutrientes necesarios para mantenerte sano, sentirte bien y tener energía. Estos nutrientes incluyen proteínas, carbohidratos, grasas, agua, vitaminas y minerales.