Un cardiólogo señala el tipo de queso recomendado para cuidar la salud del corazón

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El queso, alimento versátil y delicioso que acompaña nuestras mesas desde hace siglos, no solo es un placer para el paladar, sino que también puede ofrecer múltiples beneficios para la salud. Desde sus versiones frescas hasta las más añejas, el queso es una fuente rica de proteínas, calcio y otros nutrientes esenciales que contribuyen al bienestar general. Aunque durante mucho tiempo se ha pensado que el queso podría ser perjudicial debido a su contenido en grasas saturadas, nuevas investigaciones y opiniones de expertos están desafiando esta percepción.

Consumir queso de manera moderada puede ser parte de una dieta equilibrada, aportando nutrientes que son fundamentales para el buen funcionamiento del cuerpo. Las proteínas presentes en el queso son de alta calidad, lo que significa que contienen todos los aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita para reparar tejidos y mantener la masa muscular. Además, el calcio que aporta es crucial para la salud ósea, ayudando a prevenir enfermedades como la osteoporosis.

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Otro punto a favor del queso es su capacidad para ser incorporado en diversas preparaciones culinarias, desde ensaladas hasta platillos más elaborados. Sin embargo, no todos los quesos son iguales en cuanto a sus beneficios para la salud, especialmente cuando se trata del cuidado del corazón. No obstante, hay un queso específico que es el mejor aliado para nuestra salud coronaria.

Mozzarella: el mejor para la salud cardíaca

El doctor Chen-Han Chen, un reconocido cardiólogo y director médico del programa de cardiopatías del MemorialCare Saddleback Medical Center, ha puesto en el punto de mira al queso mozzarella como una opción particularmente saludable para el corazón. A diferencia de quesos como el manchego o el azul, que suelen tener un mayor contenido de grasas saturadas y sodio, la mozzarella destaca por su perfil nutricional más equilibrado, lo que lo convierte en una opción más favorable para quienes buscan cuidar su salud cardiovascular.

El queso mozzarella, especialmente en su versión fresca, es bajo en sodio y grasas saturadas en comparación con otros quesos. Esto es importante porque una dieta alta en estos componentes puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Según el cardiólogo, el consumo moderado de mozzarella puede formar parte de una dieta saludable para el corazón, aportando beneficios como una mayor ingesta de proteínas y calcio, y hasta probióticos que ayudan a la salud intestinal.

Una porción típica de mozzarella ofrece más de seis gramos de proteína, un nutriente clave para mantener el músculo y apoyar la pérdida de peso, factores que también influyen en la salud del corazón. Además, contiene una cantidad moderada de sodio, lo que es crucial para quienes buscan controlar su presión arterial. El doctor Chen también resalta que la mozzarella puede ser un excelente complemento de la dieta DASH, que ha demostrado reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.

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Pero, no solo se trata de qué queso consumir, sino de cómo incluirlo en tu dieta diaria. El cardiólogo sugiere integrar la mozzarella en ensaladas, como parte de un desayuno equilibrado o acompañando a verduras frescas. Esto no solo añade sabor, sino también una dosis de nutrientes esenciales sin comprometer la salud cardíaca.

Quesos a evitar para mantener un corazón saludable

No obstante, Chen advierte sobre los quesos que es mejor evitar o consumir con mucha moderación. Los quesos procesados, como el cheddar o el queso azul, suelen tener un alto contenido de grasas saturadas y sodio, lo que puede contrarrestar los beneficios de una dieta saludable. Además, estos quesos suelen estar cargados de calorías, lo que podría dificultar el control de peso, otro factor clave en la salud cardiovascular.

La mozzarella, en su versión fresca, destaca por su perfil nutricional más equilibrado, al ser bajo en sodio y grasas saturadas

Por lo tanto, para quienes disfrutan del queso, pero quieren cuidar su corazón, la recomendación es clara: opta por quesos frescos y bajos en sodio, como el mozzarella, y evita aquellos que son altamente procesados. La moderación es clave, y al combinar la mozzarella con una dieta rica en frutas, verduras y cereales, se puede disfrutar de sus beneficios sin poner en riesgo la salud.