Este es el alimento que recomienda esta neuróloga para mantener el cerebro sano
Cuidar el cerebro a través de una alimentación adecuada es esencial para preservar la función cognitiva y prevenir enfermedades neurodegenerativas
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La salud neurológica está intrínsecamente vinculada a la calidad de la alimentación, ya que el cerebro depende de una serie de nutrientes esenciales para funcionar de manera óptima. Vitaminas, minerales y antioxidantes, presentes en una dieta equilibrada, juegan un papel crucial en la protección de las neuronas, la mejora de la memoria y la reducción del riesgo de enfermedades neurodegenerativas. Estos nutrientes ayudan a combatir el daño celular causado por los radicales libres, apoyan la regeneración neuronal y contribuyen a mantener una buena salud mental.
El tipo de dieta que se sigue puede influir directamente en la función cognitiva y en el estado de ánimo. Por ejemplo, una dieta rica en alimentos integrales, vegetales, frutas y grasas saludables, como la mediterránea, proporciona los nutrientes necesarios para mantener el buen estado del cerebro y del resto del cuerpo, tal y como explican desde la Fundación Pascual Maragall. Esta relación entre lo que comemos y la salud de nuestro cerebro subraya la importancia de una alimentación consciente y equilibrada para mantener el bienestar neurológico a lo largo del tiempo.
Cuidar la salud cerebral es una prioridad para muchos, y la doctora Lori Schneider, una reconocida neuróloga, ha compartido en una entrevista en Parade su recomendación diaria para mantener el cerebro en óptimas condiciones: el consumo de hongos. Este alimento, que forma parte de su dieta diaria, se destaca por sus múltiples beneficios no solo para el cerebro, sino también para la salud general del organismo.
Los hongos, entre los que se encuentran las setas, los robellones o los champiñones, son ricos en antioxidantes, fundamentales para proteger el cuerpo contra los radicales libres, compuestos que pueden causar inflamación en todo el cuerpo, incluyendo el cerebro. Según la doctora Schneider, “los antioxidantes en los hongos ayudan a mitigar los efectos de los radicales libres, ofreciendo una protección esencial para las células cerebrales”.
Algunas variedades de hongos incluyen el champiñón, shiitake, portobello, reishi y melena de león.
Además de los antioxidantes, los hongos poseen un alto contenido de fibra, un nutriente crucial para la salud intestinal, que a su vez influye directamente en la función cognitiva. La doctora Schneider explica que “la conexión entre el intestino y el cerebro, conocida como el eje cerebro-intestino, significa que lo que es beneficioso para el intestino también lo es para el cerebro”. De este modo, una dieta rica en fibra puede mejorar la salud mental y la capacidad cognitiva.
Propiedades antiinflamatorias de los hongos
Como explican en un estudio publicado en PubMed, otra propiedad destacable de los hongos es su contenido en betaglucanos, un tipo de fibra soluble que no solo apoya el sistema inmunológico, sino que también ayuda a regular el azúcar en sangre, reducir el colesterol y disminuir el riesgo de cáncer. Entre los hongos, la melena de león ha sido utilizada en la medicina tradicional china durante siglos debido a sus efectos positivos en la reducción del estrés, la ansiedad y la depresión.
Para finalizar, la doctora Schneider menciona que disfruta de los hongos tanto por sus beneficios como por su versatilidad en la cocina. Le gusta prepararlos salteados con aceite de oliva y vinagre balsámico, o incluso freírlos al aire después de marinarlos, logrando así platos que son tanto saludables como sabrosos.
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