Truco: cómo hacer un atadillo de hierbas con puerro para tus guisos favoritos
Tus platos ya no serán lo mismo si los 'decoras' con este curioso y aromático ramo hecho de las hojas verdes de este alimento que no utilizas y perejil, laurel, romero...
Un atadillo, o 'bouquet garni' en su término francés, es un ramillete de hierbas frescas o secas que sirven para condimentar guisos, caldos y sopas. Aprovecha las hojas verdes de los puerros que normalmente no se utilizan en la confección de platos y en lugar de tirarlas, rellénalas de aromáticas. Solo tendrás que atarlas con un sencillo hilo de cocina para asegurar su contenido. Podrás utilizarlas sin necesidad de repescar las ramas de hierbas al final de la cocción de las preparaciones. Puedes incluso preparar varios atadillos y refrigerarlos una semana o congelarlos varios meses en una bolsa estanca para usos posteriores.
Ingredientes
- 1 puerro
- 1 manojo de perejil fresco
- 2 hojas de laurel
- 1 rama de romero fresco
Elaboración
- Corta la parte verde del puerro y conserva la blanca para otro uso.
- Limpia las hojas más grandes quitando cualquier resto de tierra y sécalas bien con un paño o con papel de cocina.
- Abre las hojas de puerro y pon una rama de perejil, otra de romero y una hoja de laurel en el interior.
- Cierra la hoja de puerro como si fuera un sándwich.
- Corta la hoja de puerro rellena por la mitad para que sea más fácil anudarla.
- Corta un hilo de cocina y enróllalo alrededor del puerro de manera que no se salgan del interior. Anuda firmemente y fíjalo con un lazo o un nudo.
- Conserva en la nevera durante una semana o congela varios meses
El truco final
En función del tipo de guiso en el que vayas a utilizar el atadillo, puedes elegir distintas hierbas como tomillo, albahaca, salvia, hojas de apio e incluso añadir piel de naranja, clavos de olor o nuez moscada.
Un atadillo, o 'bouquet garni' en su término francés, es un ramillete de hierbas frescas o secas que sirven para condimentar guisos, caldos y sopas. Aprovecha las hojas verdes de los puerros que normalmente no se utilizan en la confección de platos y en lugar de tirarlas, rellénalas de aromáticas. Solo tendrás que atarlas con un sencillo hilo de cocina para asegurar su contenido. Podrás utilizarlas sin necesidad de repescar las ramas de hierbas al final de la cocción de las preparaciones. Puedes incluso preparar varios atadillos y refrigerarlos una semana o congelarlos varios meses en una bolsa estanca para usos posteriores.
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