Menú
La receta de aprovechamiento para convertir el pan duro en buñuelos: es tan rápida que la harás una y otra vez
  1. Recetas
NO TIRES EL PAN DURO

La receta de aprovechamiento para convertir el pan duro en buñuelos: es tan rápida que la harás una y otra vez

Una barra de pan que se pone dura tiene el mismo potencial que una hogaza recién hecha, solo hay que conocer varias recetas de aprovechamiento y nunca más tirarás un pan duro

Foto: La receta de aprovechamiento para convertir el pan duro en buñuelos: es tan rápida que la harás una y otra vez.  (TikTok/@recetillasmari)
La receta de aprovechamiento para convertir el pan duro en buñuelos: es tan rápida que la harás una y otra vez. (TikTok/@recetillasmari)

No será la primera vez ni la última que tengas una barra de pan en casa que se ha puesto dura. Existe una regla no escrita de la cocina española, y es que el pan duro nunca se tira a la basura, sino que se emplea para preparar otras cosas, como torrijas o sopa castellana, o simplemente para rallarlo y reservarlo para un rebozado o para unas migas.

A continuación, te enseñamos otra receta de aprovechamiento que te ayudará a usar el pan duro, para hacer una merienda o cena rápida, o para picar con los amigos. Se trata de los buñuelos de pan duro o también llamados huevos tontos, un plato saciante y muy sencillo de hacer. Su origen se encuentra, como otras muchas recetas españolas, en la carestía de épocas más difíciles, en las que la carne y el pescado escaseaban, y había que atajar el hambre.

La base de los buñuelos de pan duro es siempre la misma, como la que explican en un vídeo de @recetillasmari, pero existen diferentes variantes de esta receta, en las que se añade a la masa sobras de otros platos, como carne, verduras o pescado. Para hacer la masa de nuestros buñuelos de aprovechamiento, debemos remojar con agua o leche la barra de pan dura para, cuando haya recuperado la humedad, desmigarla en un cuenco.

Así se hace la mezcla

A estas migas de pan, más manejables al estar húmedas, debemos agregarles de dos a cuatro huevos batidos, dependiendo de la cantidad de pan que tengamos y los comensales. Para darle sabor a la mezcla, agregaremos ajo picado, perejil, sal y pimienta. Debemos integrar bien todos los ingredientes, ya sea con la ayuda de un tenedor o con un procesador de alimentos. Esta masa la dejaremos reposar una media hora en la nevera.

El siguiente paso es hacer bolas con la masa, dándole la forma de buñuelos o croquetas, con la ayuda de dos cucharas o con las propias manos. Con abundante aceite de oliva caliente, freiremos las bolas hasta dorarlas y las dejaremos reposar en un plato con papel absorbente. El resultado son unos buñuelos sabrosos, esponjosos y saciantes que gustan a todo el mundo.

No será la primera vez ni la última que tengas una barra de pan en casa que se ha puesto dura. Existe una regla no escrita de la cocina española, y es que el pan duro nunca se tira a la basura, sino que se emplea para preparar otras cosas, como torrijas o sopa castellana, o simplemente para rallarlo y reservarlo para un rebozado o para unas migas.

Recetas Alimentos
El redactor recomienda