Aprende a preparar papas con choco como una auténtica abuela andaluza, el guiso perfecto para este otoño

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Con las bajadas de temperatura que trae el otoño cada vez más cerca, los guisos se convierten en una opción irresistible para disfrutar de comidas reconfortantes. Sus aromas y sabores profundos, cocidos a fuego lento, evocan la calidez del hogar en los días más frescos. No hay mejor época que esta para deleitarse con platos que nos envuelven en tradición y confort.

En concreto, las papas con choco representan una de las joyas más preciadas de la gastronomía andaluza, especialmente durante la temporada otoñal. Este guiso tradicional, que combina la suavidad de las patatas con la textura inconfundible del choco, ha sido parte esencial de la cocina familiar en provincias como Huelva y Cádiz. Su popularidad no solo radica en su sabor, sino también en su sencillez, lo que lo convierte en un plato accesible y delicioso para cualquier ocasión.

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El Confidencial

El origen de las papas con choco se encuentra en los puertos pesqueros del sur de España, donde los marineros aprovechaban los productos frescos del mar junto con ingredientes básicos como las patatas. El resultado es un guiso que destaca por su riqueza de sabores, potenciada por un sofrito de verduras en el que el pimiento, la cebolla y el ajo juegan un papel fundamental. La adición de vino blanco al guiso realza los sabores y aporta una frescura característica que equilibra la intensidad del choco.

La clave del éxito: ingredientes frescos

Para lograr que este plato alcance su máximo potencial, es esencial prestar atención a la calidad de sus ingredientes. Uno de los aspectos más importantes es el uso de choco fresco y de calidad, lo que asegura una textura firme y un sabor profundo. Para dos personas, necesitaremos 3 patatas, 2 sepias, chocos o jibias, 1 pimiento verde italiano, 1 cebolla, 3 dientes de ajo, 1 hoja de laurel, 1 tomate maduro, 1 vasito de vino blanco y 500 mililitros de caldo de pescado o de agua.

Papas con choco, paso a paso

Para comenzar la preparación de las papas con choco, lo primero es elaborar un sofrito que será la base del guiso. En una cazuela, añadimos un buen chorro de aceite de oliva y sofreímos a fuego medio la cebolla, el ajo y el pimiento verde, todos ellos finamente picados. Una vez que las verduras estén bien pochadas, incorporamos el tomate rallado, una cucharada de pimentón y la hoja de laurel, y dejamos que se cocine todo junto durante unos minutos para que los sabores se mezclen a la perfección.

A continuación, cortamos los chocos limpios en trozos medianos y los añadimos al sofrito, a fuego vivo hasta que estén dorados, unos 10 minutos suele ser suficiente. El siguiente paso es verter un vaso de vino blanco en la cazuela y, una vez evaporado el alcohol, añadir agua o caldo de pescado junto con las patatas peladas y chascadas para que suelten el almidón y espesen la salsa. Cocinamos a fuego medio durante unos 20 minutos, hasta que las patatas estén tiernas, y si queremos, agregamos guisantes en los últimos minutos de cocción. Ajustamos la sal al final y servimos el guiso bien caliente.

Las papas con choco son una opción nutritiva, rica en proteínas, fibra y minerales esenciales

Este guiso, que se sirve caliente y se disfruta con cuchara, es perfecto para compartir en reuniones familiares. La versatilidad de la receta permite adaptaciones según la región, como la incorporación de guisantes o garbanzos, que añaden un toque de color y dulzor al plato. Aunque es una receta tradicionalmente vinculada a Andalucía, se pueden encontrar versiones similares en otras zonas costeras de España, como Galicia, donde platos como el marmitako comparten el mismo espíritu marinero.