Cómo hacer calçots y salsa romesco en casa: la receta fácil para cocinarlos en horno o freidora de aire

• Calçots en Madrid: los 12 mejores restaurantes para disfrutar de este delicioso manjar catalán
• ¿De dónde viene y desde cuándo existe la costumbre de comer calçots en Cataluña?

La temporada de calçots ya está aquí, y con ella, la oportunidad de disfrutar de esta delicia gastronómica típica de Cataluña sin necesidad de hacer una barbacoa. Estos brotes tiernos de cebolla, conocidos por su sabor suave y ligeramente dulce, son los protagonistas de la tradicional 'calçotada', una fiesta culinaria que se celebra principalmente en la provincia de Tarragona. Aunque la costumbre dicta que sean asados a la brasa, existen métodos sencillos para cocinarlos en casa sin perder su esencia.

Los calçots de Valls, con Indicación Geográfica Protegida (IGP), son los más apreciados. Se cultivan mediante un proceso que consiste en cubrirlos progresivamente con tierra para favorecer su alargamiento y conseguir una textura tierna. Aunque su preparación más habitual es al fuego vivo, el horno y la freidora de aire permiten obtener resultados muy similares sin complicaciones. Además, no pueden faltar con su inseparable compañera: la salsa romesco.

TE PUEDE INTERESAR

Qué son los calçots y dónde comer los mejores en Barcelona

Lucía Molina

Cocinar calçots en casa es más fácil de lo que parece y el resultado puede sorprender a los más puristas. Con unos sencillos pasos, se puede disfrutar de su característico sabor caramelizado y ahumado sin necesidad de salir de casa. A continuación, te contamos cómo hacerlos en horno y freidora de aire, además de la receta de la salsa romesco para acompañarlos.

Cómo hacer calçots al horno y en freidora de aire

Para preparar unos deliciosos calçots en casa, necesitarás un manojo de calçots, si son de Valls mucho mejor. También es necesario aceite de oliva virgen extra para potenciar su sabor y textura, sal para realzar su gusto, pimienta negra recién molida para un toque aromático y, por supuesto, salsa romesco casera, el acompañamiento imprescindible para disfrutar de esta receta como en una auténtica calçotada.

Preparación en el horno:

1. Precalentar el horno a 200ºC.
2. Limpiar bien los calçots retirando la tierra sin mojarlos demasiado. Se pueden quitar las raíces más largas y la primera capa exterior.
3. Colocarlos sobre una rejilla con un chorrito de aceite de oliva y un poco de sal.
4. Hornear durante unos 30-40 minutos, girándolos a mitad de la cocción para que se doren de manera uniforme.
5. Servir calientes, pelando la capa exterior quemada antes de comerlos.

Preparación en freidora de aire:

1. Lavar y secar bien los calçots.
2. Cortarlos un poco si no caben enteros en la cesta de la freidora.
3. Cocinar a 200ºC durante 15 minutos, removiéndolos a la mitad del tiempo para que se cocinen de manera uniforme.
4. Servir con salsa romesco y disfrutar al momento.

Cómo hacer salsa romesco casera

Para preparar una auténtica salsa romesco casera, necesitarás 3 tomates maduros y 1 cabeza de ajos, que aportarán la base de sabor asado. Además, serán imprescindibles 2 ñoras o pimientos choriceros, previamente hidratados, para darle su característico toque dulce y ahumados.

Los frutos secos son clave en esta receta, por lo que se incluyen 15 g de almendras tostadas y 15 g de avellanas tostadas, junto con 1 rebanada de pan tostado que ayudará a espesar la salsa. Para aliñarla, se añaden 100 ml de aceite de oliva virgen extra, 30 ml de vinagre, una pizca de pimentón dulce y sal al gusto, logrando así una textura cremosa y un equilibrio perfecto de sabores.

Preparación: paso a paso

1. Hidratar las ñoras en agua tibia durante al menos 30 minutos. Luego, retirar la carne con una cuchara y reservar.
2. Asar los tomates y la cabeza de ajos en el horno a 200ºC durante unos 20 minutos, hasta que estén tiernos.
3. Pelar los tomates y los ajos, y triturarlos junto con las almendras, las avellanas, la carne de las ñoras y el pan tostado.
4. Añadir el pimentón, el vinagre y el aceite de oliva poco a poco mientras se sigue batiendo hasta obtener una textura cremosa.
5. Ajustar la sal al gusto y servir con los calçots.

Esta receta permite disfrutar de una auténtica calçotada en casa sin complicaciones. Con estos sencillos pasos, se consigue el característico sabor ahumado de los calçots y una salsa romesco con la textura y el equilibrio de sabores perfectos. No obstante, si no quieres complicarte mucho, siempre hay opciones en distintos restaurantes de Madrid.