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Comer menos carne, una estrategia efectiva para un mundo más sostenible
  1. Sostenibilidad
Reducir los cárnicos

Comer menos carne, una estrategia efectiva para un mundo más sostenible

En busca de un mundo más sostenible hay algunos hábitos que podemos modificar y el excesivo consumo de carne es uno de lo más importantes

Foto: Consumir menos carne para un planeta más sostenible. (Eugene para Unsplash)
Consumir menos carne para un planeta más sostenible. (Eugene para Unsplash)

Cada vez somos más conscientes de la importancia que tienen nuestras decisiones personales a la hora de proteger el planeta. Aunque sepamos que las grandes soluciones son las más efectivas, hace tiempo que tenemos claro que quedarnos de brazos cruzados no es la mejor idea y por eso encontrar la forma de poner nuestro granito de arena en el proceso de cuidar el mundo que les dejamos a las nuevas generaciones ha pasado a ser de vital importancia.

Pequeños factores que todos tenemos al alcance de la mano, como los que nos invitan a tener un baño sostenible, a no derrochar agua, cerrando los grifos cuando no los estamos usando, aprovechando para regar las plantas, siempre llenas de energía, con el agua que nos ha sobrado en la jarra de la comida o empleando electrodomésticos más eficientes. Hemos aprendido a separar en casa los residuos, para que el reciclaje se convierta en una norma y ahora sabemos que también es el momento de cambiar algunos de nuestros hábitos de consumo.

placeholder Comer menos carne para un planeta más sostenible. (Emerson Vieira para Unsplash)
Comer menos carne para un planeta más sostenible. (Emerson Vieira para Unsplash)

La carne ha formado parte de nuestra alimentación desde siempre, nos aporta grandes cantidades de proteína, así como otros nutrientes que son importantes, como vitaminas del grupo B o minerales como el hierro, el magnesio o el zinc. Sin embargo las cantidades que consumimos son mayores de las recomendadas, esto hace que sea necesaria una mayor producción, que está repercutiendo en la salud del planeta.

Desde plataformas como Greenpace hace tiempo que ven esto claro y por eso recomiendan consumir menos y mejor carne. “La ganadería es la responsable de la emisión del 14% de los Gases de Efecto Invernadero”, aseguran en su página web, desde la que llevan tiempo denunciando cómo la acción del hombre está desgastando los recursos del planeta, empobreciéndolo y haciendo que sea más complicado la vida en él.

placeholder Comer menos carne para un planeta más sostenible. (Eiliv-Sonas Aceron para Unsplash)
Comer menos carne para un planeta más sostenible. (Eiliv-Sonas Aceron para Unsplash)

“La ganadería industrial es la responsable de la pérdida de biodiversidad en ecosistemas críticos como por ejemplo la Amazonia, de un elevado consumo de agua y de la contaminación de los acuíferos, de un consumo exagerado de antibióticos, de la destrucción del modo de vida rural y además no cuida el bienestar animal”, por todo ello recomiendan dietas más vegetarianas y que los alimentos animales que consumamos “provengan de la ganadería extensiva, ecológica y local”.

Esto es algo que también avalan instituciones como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, que aseguran que con este sistema de alimentación no solo estamos contribuyendo a aumentar el calentamiento global, también estamos consumiendo los recursos del planeta. “La producción de alimentos implica el uso del 48% de los recursos de la tierra y el 70% de los recursos de agua a nivel mundial”, según recogen sus informes.

placeholder Comer menos carne para un planeta más sostenible. (David Metzer para Unsplash)
Comer menos carne para un planeta más sostenible. (David Metzer para Unsplash)

Además, no podemos dejar de señalar que un excesivo consumo de carnes rojas se ha asociado con un mayor riesgo de padecer determinadas enfermedades, como aquellas de tipo cardiovascular, un aumento del colesterol e incluso algunos tipos de cáncer. Así, la OMS (Organización Mundial de la Salud) recomienda, para un correcto funcionamiento del sistema, reducir el consumo de carne a dos o tres veces por semana. Aunque, si no quieres renunciar a su sabor o textura, puedes sustituirlo por las carnes vegetales de guisantes, zanahoria o soja que nos ofrecen firmas como la española Heura.

Es evidente que con estos pequeños gestos no estaremos salvando el planeta de un día a otro, pero sí estaremos ayudando a lograrlo. Reducir nuestro consumo de carne y seleccionar aquellas obtenidas de forma sostenible puede ser un primer paso en una estupenda dirección. Por eso, crecen las iniciativas como la dieta Plant-Based, donde los productos de origen animal se reducen, sustituyéndola por legumbres, hortalizas, frutas y demás vegetales.

Cada vez somos más conscientes de la importancia que tienen nuestras decisiones personales a la hora de proteger el planeta. Aunque sepamos que las grandes soluciones son las más efectivas, hace tiempo que tenemos claro que quedarnos de brazos cruzados no es la mejor idea y por eso encontrar la forma de poner nuestro granito de arena en el proceso de cuidar el mundo que les dejamos a las nuevas generaciones ha pasado a ser de vital importancia.

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