Muy buenas noticias para los pacientes de vitíligo: llegan nuevos fármacos

El vitíligo no es una patología contagiosa ni dolorosa, sino un trastorno fundamentalmente estético que tiene un impacto emocional importante. La piel de los pacientes con vitíligo se caracteriza por una pérdida completa de la melanina y la ausencia de melanocitos (células responsables del color de la piel). Según la doctora Elena Tévar, dermatóloga que dirige la Unidad de Vitíligo de Clínica Dermatológica Internacional y del Hospital Ruber Internacional, “se considera una enfermedad multifactorial en la que coexisten factores genéticos, factores inmunológicos (autoinmunidad) y en el que se han descrito diversos factores desencadenantes como quemadura solar severa, embarazo, traumatismos en la piel o estrés psicológico significativo”.

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El vitíligo afecta a entre el 0,5-2% de la población aproximadamente y se da por igual en todos los lugares del mundo. Aparece antes de los 20 años casi en el 50% de los pacientes y en el 70-80% antes de los 30 años. Se afectan hombres y mujeres por igual, aunque más mujeres consultan al médico, probablemente por un mayor impacto psicosocial de la enfermedad.

La evolución del vitíligo es impredecible. La ausencia de tratamientos que garanticen la repigmentación de las manchas y el hecho de que se trate de una enfermedad visible pueden llegar a generar mucho sufrimiento en las personas que la padecen. En muchos casos llegan a cambiar sus hábitos de vida, su forma de vestir o sus hobbies por intentar ocultar las manchas o hacerlas menos visibles.

Cómo tratamos ahora el vitíligo

Aunque hay muchos tratamientos descritos para el vitíligo, eran muy pocos los que tenían una evidencia científica demostrada. La doctora Elena Tévar, que lleva tratando pacientes con vitíligo más de 15 años, afirma que “el manejo más eficaz hasta el momento actual continuaba siendo la terapia combinada, en la que se emplean tratamientos tópicos como corticoides o inmunomoduladores asociados a fototerapia con UVB de banda estrecha. La respuesta a este tratamiento depende sobre todo de la localización de las manchas (la cara es lo que mejor responde, y las manos y los pies, lo que tiene peor respuesta) y el tiempo de evolución”.

Opinión

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Revolución farmacológica

Desde hace poco, contamos con un nuevo fármaco con evidencia clínica tanto en eficacia como en seguridad y que es el único aprobado por la FDA (Food and Drug Administration) para el tratamiento del vitíligo (junio 2022) y que recientemente ha sido aprobado por la EMA (Agencia Europea del Medicamento). Es el ruxolitinib 1,5% tópico, que es un inhibidor de las Janu Kinasas. Estas moléculas bloquean de forma selectiva las defensas que destruyen los melanocitos, evitando que las defensas de los pacientes con vitíligo eliminen las células productoras de melanina.

La doctora Tévar está muy ilusionada con los resultados publicados con este fármaco y piensa que su uso va a ser de gran ayuda para los pacientes con vitíligo.

Según explica, “el ruxolitinib está aprobado en mayores de 12 años, basándose en los resultados de 2 ensayos en fase 3 con un total de 674 pacientes. La pauta recomendada es de una capa fina de ruxolitinib 2 veces al día en las lesiones hasta un máximo del 10% de la superficie corporal. Los resultados obtenidos en los ensayos clínicos muestran una repigmentacion clínica relevante".

Se han observado resultados significativos en algunas localizaciones donde la respuesta es complicada, como son las manos y los pies

La dermatóloga añade que "también se han podido observar resultados significativos en algunas localizaciones donde la respuesta es complicada, como son las manos y los pies. La respuesta se valora a los 6 meses de tratamiento y los pacientes continúan mejorando hasta los 13 meses de tratamiento”.

Todavía faltan datos

Me gusta recordar la frase de que "en medicina hay que leer lo último y usar lo penúltimo". Ruxolitinib y los fármacos que pertenecen a los llamados inhibidores de las Janu Kinasas parece que son eficaces para repigmentar, pero nos falta mucha información sobre su manejo. La doctora Tévar destaca la importancia de la prudencia a la hora de incorporar un nuevo fármaco a nuestros pacientes. “Falta por comprobar si los pacientes son capaces de mantener esta frecuencia de aplicación de 2 veces al día durante periodos tan prolongados de tiempo. También parece que la asociación con fototerapia mejora los resultados, aunque queda pendiente el desarrollo de estudios en esta línea”, afirma.

Por el momento parece que es un fármaco bien tolerado. El efecto adverso más frecuente es una erupción acneiforme en la zona de aplicación que puede controlarse con retinoides tópicos (tratamiento habitualmente empleado en acné), aunque falta determinar posibles efectos adversos cuando se utiliza a largo plazo.

También está pendiente de investigar su seguridad en embarazo y lactancia, y queda por determinar la seguridad y eficacia en población pediátrica y el tratamiento de la zona genital.

Conclusión

Actualmente, los pacientes con vitíligo sufren mucho, por lo que es de agradecer actitudes como las de la Winnie Harlow, modelo canadiense que, cansada de que la llamaran “cebra” o “vaca”, decidió aceptar su piel asegurando que “la gente tiene la piel negra o blanca, y yo tengo ambas”.

También tienen mérito iniciativas como la de Kay Customs, que fabrica muñecas de porcelana con vitíligo para dar a conocer la enfermedad. Por ello, Elena Tévar siempre ha destacado la importancia del apoyo emocional a estos pacientes, que hasta el momento era en cierta forma una cura de humildad para los dermatólogos.

La buena noticia es que parece claro que en breve podremos disponer de un grupo de fármacos que utilizados con precaución y sentido común van a mejorar mucho la calidad de vida de nuestros pacientes con vitíligo.